Actualmente está de moda tener el cabello liso, por lo que la gran mayoría de las mujeres optamos por ir a un salón de belleza o por hacerlo nosotras mismas con la ayuda de una plancha utilizando productos que favorecen el alisado.
Sin embargo, el visitar un salón de belleza es bastante costoso y en ocasiones resulta bastante complicado trasladarse de un lugar a otro, por lo que puede ser algo estresante esta opción.
Por otro lado, cuando lo hacemos nosotras mismas debemos disponer de algo de tiempo y en ocasiones nos cuesta darnos ese tiempo, y además no obtenemos los resultados esperados, así como también no a todas las chicas se nos facilita hacerlo, por lo que nos resulta algo difícil esta opción.
Lo que debes hacer para alisar tu cabello sin dañarlo.
Algo muy importante que es fundamental resaltar es que con el uso de productos químicos y calor en nuestro cabello, causamos graves daños que en muchos de los casos son irreversibles, por lo que la única opción sería cortarlo completamente, y eso es algo que por supuesto no queremos hacer.
Afortunadamente, existe un fabulosa técnica natural para alisar nuestro cabello que se hace a base de bicarbonato de sodio, el cual nos ayudará a lograr ese liso perfecto que tanto deseamos, así como también le aportará brillo y sedosidad al cabello.
La técnica natural para alisar el cabello es muy fácil de hacer, debido a que sólo necesitas:
Agregar 1 cucharadita de bicarbonato de sodio a tu champú habitual y agitarlo fuertemente para que el bicarbonato de sodio se mezcle con el producto.
La forma en la que debes utilizar el champú es la misma, ya que sólo tienes que lavar tu cabello como de costumbre.
Además, puedes usar esta técnica durante el tiempo que necesitas o si lo prefieres también de manera habitual para mantener tu cabello hermoso.
Recuerda que los hábitos que mantienes a la hora de cuidar tu cabello también son importantes, como por ejemplo: no debes lavarlo nunca con agua caliente porque cualquier tipo de calor daña bastante el cabello, cuando lo laves hazlo solamente usando las yemas de los dedos con suaves movimientos circulares y al secarlo utiliza una toalla ejerciendo un poco de presión sobre el cabello.
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